Se perdió durante 80 horas en el mar. Dice que sentía el sol en su cara «como 1.000 agujas picando»

Con 60 años, el instructor de buceo en Singapur, John Low, se perdió durante casi 4 días en alta mar. Tiburones y barracudas nadaban bajo él y podía advertir sus aletas.

Uno de los riesgos de navegar es el naufragar. Y eso bien lo aprendió John Low, quien a sus 60 años, cuando se encontraba a 500 metros de la Isla Tioman en Malasia, sufrió los embates de un clima hostil, que lo hizo hundirse con su bote. Con mucho esfuerzo y gracias a su experiencia como instructor de buceo en Singapur, logró aferrarse a una boya junto a su mochila.

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Esta última era de vital importancia, debido a que contenía objetos que le serían muy útiles en su estancia de 80 horas en alta mar, sin olvidar que además ahí estaba su tarjeta de identidad de registro nacional, que le permitiría ser reconocido tanto en el mejor, como en el peor de los casos.

Low, logró mantener la calma estando en medio de la nada durante un buen tiempo. Pero después de unas cuantas horas, el no ver tierra le empezó a preocupar y a poner ansioso. Si la verdad es que, no tenía ni agua ni comida para sobrevivir durante mucho tiempo más.Facebook John Low

Una de las cosas que hizo para mantenerse estable mentalmente, fue hablar con su boya y su reloj (un Comandante de Mido de Rolex), a los que les llamó «niño» y «hermano» respectivamente. Pero lamentablemente no encontró medidas contra la exposición prolongada al sol, la cual le provocó quemaduras de un nivel de dolor intolerable.

«Si mantienes tu cabeza al aire libre, te quemas, lo que significa una sensación de ardor en la cara (…) La única manera de evitar eso es poner tu cara en el agua (…) Debido a que mi cara está completamente cicatrizada, ya que había estado en el agua durante cuatro días y tres noches, al ponerla en el agua me sentí como 1.000 agujas picando»

– dijo Low en una entrevista para Lianhe Zaobao.

Low tuvo que soportar eso, y además sentir como nadaban alrededor de su cuerpo desnudo, criaturas marinas que él decía que eran tiburones y barracudas. Sentía como aletas y una especie de pez se movía cerca suyo, y se frotaban con su cuerpo, temiendo Low perder una pierna o un brazo.Facebook John Low

Finalmente en la cuarta noche fue rescatado por la tripulación de un barco de 10 pisos llamado Diogo Cao. Y poco después de contactarse ellos con las autoridades de Singapur, estas desplegaron el equipo Rescue 10 de la República de la Fuerza Aérea de Singapur. Low, se recuperó en un mes de una infección pulmonar, una insuficiencia renal y de otras lesiones, para terminar posteriormente calificando a los Rescue 10 como «héroes».

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